sábado, agosto 11, 2018

SUSURROS DE AMOR Y AFIRMACIÓN


Se siente bien orar sin vergüenza —seguras de que somos esperadas y recibidas con los brazos abiertos, a pesar de nuestras imperfecciones y emociones despeinadas.



Yo miro tu corazón…

Con mis ojos de amor puedo ver más allá de tus heridas, de tus secretos, de tus temores, de las murallas que levantas como mecanismo de defensa. Tranquila, en mis brazos estás segura.

No hay nada en tu historia que me sea oculto; soy el único capaz de escuchar el llanto en tu interior, aunque tu rostro esté maquillado con una sonrisa. Déjame secarte esas lágrimas, permíteme abrazarte cerquita de mi corazón.

Con mis ojos de misericordia recorro cada rincón de tu alma sin hacerte sentir indigna ni añadir más peso a tu abatido corazón, al contrario, mi mirada te infunde paz, y sientes la elocuencia de mi amor susurrándote —no temas. Te amo como nadie jamás podrá hacerlo. Desde antes de nacer te aprobé y te aparté para mis planes y propósitos—.


“Crecer más cerca de Dios no es el resultado de esforzarse más, sino de rendirse más”. 

- Elyse Murphy

 


Muchas veces temes abrir tus áreas más vulnerables por temor al rechazo y hasta por vergüenza, pero quiero decirte que mi gracia, mi amor y mi fidelidad están por encima de tus debilidades, fracasos, limitaciones, heridas y tristezas.

Mi gracia es suficiente. Mi poder se hace fuerte en tu debilidad.

Acepta mi perdón, y disfruta el regalo de no condenación…

Acepta mi gracia, y disfruta el regalo de mi favor inmerecido…

Acepta mi justicia, y disfruta el regalo de la libertad…

Acepta mi amor, y disfruta de mi plenitud…

Mis susurros de amor, de aceptación y afirmación sanan tu alma, liberan tu corazón y te visten de alegría.

-Aquél que dio la vida por ti.

Qué preciosos son tus pensamientos acerca de mí, oh Dios. – Salmo139:17

Amor y gracia,

Sandy