viernes, octubre 10, 2014

SORRY!... TENGO UNA CITA CON LA VIDA



Foto: Eyewashing Design - CC






La peor falta de ortografía que existe, es  nunca ponerle punto final a aquello que nos hace daño. –Anónimo








¿Qué te atreverías a hacer si el miedo que te impide avanzar no existiera?

Desde niña, el miedo, en todas sus dimensiones, ha trabajado arduamente para impedir que la voluntad y el propósito de Dios se cumplan en mi vida.  Por mucho tiempo pensé que Dios estaba un poco distraído cuando me creó  —ha sido un largo camino y hoy puedo entender lo valiosa y especial que soy, a pesar de mis defectos e imperfecciones. Tú también puedes sentirte igual.

Veía con la libertad que los demás niños jugaban, sin embargo, había algo dentro de mí que me frenaba. En una cultura donde ser extrovertido, bulloso y conversador era la norma, una niña de pocas palabras, amante de la soledad y soñadora, en algunas ocasiones fue juzgada como “rara” y en otras, criticada por  ser ella misma. O sea, palo si bogas y palo si no bogas.

En los 70’s ni en los 80’s se hablaba del poder de las palabras, mucho menos de la importancia de alinear nuestros pensamientos con la opinión de Dios… bueno, por lo menos en mi circulo de conexión nunca lo escuché. 

Con los años aprendí a maquillar mis inseguridades, a validar la opinión de otros por encima de la mía, a tratar de complacer a otros por ganar su aprobación, a seguir caminos que nunca fueron diseñados para mí. Y entre una cosa y otra quedé atrapada en la caja de mis temores, sellada con masking tape y un letrero que leía: “Las cosas nunca van a cambiar. Los introvertidos no llegan lejos.”


 Pues Dios no nos ha dado un espíritu de temor y timidez sino de poder, amor y autodisciplina.


 

-2Timoteo 1:7 (NTV)

 


No sé cuál sea tu historia, pero es importante que entiendas que el temor es como un mago embustero, que cambia de disfraz según la ocasión, con la misión de persuadirnos a base de mentiras y engaños y así impedir que avancemos en el cumplimiento de la voluntad y el propósito de Dios para nuestras vidas.

El miedo tiene una voz cansona, retorcida y tormentosa. Su repertorio siempre es el mismo:

    Resaltar nuestros errores para convencernos de que no merecemos el perdón y el favor de Dios.


    Presentar un power point mental con imágenes desalentadoras de todo lo malo que puede pasar.


    Usar personas, circunstancias, comentarios o cualquier disparate externo para arrastrarnos a un nivel donde nuestra fe es absorbida por una avalancha de razonamientos tormentosos que aterrizan en nuestra mente y asalta nuestra estabilidad emocional.


“Valentía es el miedo que oró y decidió seguir adelante a pesar de todo.”


-Joyce Meyer

 


La clave está, en entender que el miedo siempre va estar presente de una manera u otra en nuestras vidas, pero a pesar de ello, no debemos darle entrada a nuestras vidas. Podemos sentir miedo, pero debemos avanzar a pesar del miedo ¿sabes por qué? Porque Dios es mayor que nuestros temores y Él ha prometido estar con nosotras siempre.

 ¡Él pelea nuestras batallas!

Se estima que en la Biblia existen aproximadamente 365 veces la frase “No Temas”, uno para cada día del año —Dios tiene todo fríamente calculado. ¡Qué bueno es Dios!

En la medida que engrandecemos a Dios y nos enfocamos en sus promesas y en su plan perfecto para nuestras vidas, podemos avanzar al cumplimiento de su propósito.Y nuestros miedos no tienen otro remedio que debilitarse y sujetarse  a nuestras pisadas de fe.

Sin embargo, nadie ha hecho un arma capaz de destruirte… tú harás callar a todo el que te acuse, porque Yo, el único Dios, hago triunfar a los que me adoran. Te juro que así será.


-Isaías 54:17 (TLA)

 


Así que cuando el miedo haga su entrada triunfal, míralo fijamente a los ojos —aunque te tiemblen las rodillas cual maracas en conjunto musical— y dile: Sorry! Tengo una cita con la vida. Voy camino al cumplimiento del propósito de Dios para mi vida.

¡No Temeré!


Feliz Semana,

Sandy