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| Foto: Linda Giddens - Creative Commons |
Los verdaderos amigos –aquellos que creen realmente
en ti- te ayudan a pulir tus perlas, a desarrollar
tus perlas, a expandir tus perlas, y a cultivar tus perlas. -Joel Osteen
Todo comenzó con un -¡GUAO! después de haber leído la
siguiente frase en Facebook, que provocó
una ovación de pie en todas mis neuronas cerebrales:
Si alguien quiere entrar a tu vida, que entre.
Si
alguien quiere salir de tu vida, que
salga.
Pero no permitas que se queden en la puerta,
porque estorban. (Fuente
original desconocida)
Ven, te invito a tomar un cafecito cibernético, para
degustar en detalle la riqueza que encierra esta declaración:
Si alguien quiere entrar en tu vida que entre.
Siempre y cuando sea para añadirte valor. Para
recordarte que eres una mujer única, valiosa y especial, independientemente de
tus errores y defectos.
Sí, que entre. Para colaborar con el plan de Dios en
el cumplimiento de tu propósito y la realización de tus sueños. Para celebrar tus logros. Para bailar contigo en
medio de la tormenta. De lo contrario, ahí está la puerta. Sayonara… goodbye… adiós.
Rodéate sólo con persona que te levanten más alto.
- Oprah Winfrey
Si alguien quiere salir de tu vida que salga.
Si se enfoca más en tus debilidades que en tus
fortalezas. Si no valora tus talentos.
Si en vez de motivarte te hace sentir inferior. Si cada vez que quieres
salir adelante te recuerda las veces que has caído. Si tus sueños le parecen ridículos.
Si te hace la vida un yogurt con sus comentarios y acciones carentes de
sabiduría.
Entones, lo mejor es presionar el botón de delete, festejar el adiós y seguir pa'lante con Dios.
Con ciertos amigos no hace falta enemigos, pero hay
otros amigos, que valen más que un hermano. Proverbios 18:24 (TLA)
Pero no permitas que se queden en la puerta, porque
estorban.
Tu valor no lo determina lo que los demás piensan de
ti. No eres tus errores, No eres tus debilidades. No eres tus fracasos. Eres
quien Dios dice quien eres –una obra maestra, creada a su imagen, con un
propósito definido desde antes de haber nacido.
Cuando Dios te revela tu verdadera identidad y
entiendes tu posición como su hija – el cambio
es indiscutible. Tu deseo de agradar a Dios, de hacer su voluntad, de cumplir tu propósito, y desarrollar
tu potencial, tendrá prioridad sobre cualquier tipo de opinión que los demás pueden tener de ti.
Interésate más en desarrollar tu carácter, que en
buscar la aprobación de otros. No pierdas el tiempo con quien no te valora ni
aprecia todo lo que tienes que ofrecer. Sé la clase de amiga que te gustaría tener.
Los amigos verdaderos tienen la magia de ver en nosotros fortalezas y virtudes muchas veces desconocidas por nosotros mismos. Y las nutren.
Tu círculo de amigos ¿te añade o te resta?
Sandy
