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| Foto: Shakeskc - Creative Commons |
La belleza de
una mujer no se mide en su ropa, su cuerpo, ni en su peinado. Su verdadero
encanto se refleja en el optimismo de sus pensamientos, la sabiduría de sus
palabras y su intrepidez de crecer en
medio de la tempestad.
Como mujeres tenemos el privilegio de ser hijas, hermanas,
tías, amigas, vecinas, esposas, madres, primas, madrinas,
cuñadas, abuelas, suegras, y veinte mil
cosas más.
¡Somos hermosas! ¡Somos soñadoras!
¡Somos luchadoras! ¡Somos exitosas!
Ahora bien, las virtudes no llegan por amor al arte –hay
que trabajarlas diariamente para crecer, mejorar y alcanzar nuestro potencial.
El crecimiento personal se hace una realidad en nuestras
vidas, cuando remplazamos nuestros malos hábitos por aquellos que añaden valor
a nuestras vidas.
HÁBITOS QUE EXALTAN TU GLAMOUR INTERNO:
1) Ocupa
tu mente con pensamientos positivos. Una mente positiva transforma una vida insípida
y sin sentido en un delicioso manjar de propósito.
2) No
digas todo lo que piensas. Piensa todo lo que digas. Nuestras palabras crean o
destruyen.
La lengua que brinda consuelo es árbol de vida; la lengua insidiosa deprime el espíritu. Proverbios 15:4 (NVI)
3) No
vivas para agradar a lo demás. Vive para agradar a Dios.
4) Conéctate
con personas que estén en la misma onda
tuya. Hoy en día es más fácil que nunca rodearnos de personas y recursos que
nutren nuestras vidas. Tenemos libros, audio libros, libros electrónicos, Facebook, Twitter, You Tube, Pinterest y hasta seminarios virtuales. ¡No hay
excusas!
Se necesita compromiso para cambiar y un compromiso
mucho mayor para crecer. Ralph Ellison
5) Trata
a los demás con respeto y misericordia. Dios no se impresiona con
conocimientos, sino con la disposición de imitar a Jesús en todo lo que
hagamos.
6) Desarrolla
una vida de gratitud. Dale gracias a Dios por todo y será feliz. La felicidad
es producto de la gratitud y no lo contrario.
Una persona cambia por tres razones: aprendió demasiado, sufrió lo suficiente o se cansó de lo mismo.
¡No pierdas el glamour! ¡Crece cada día!
Feliz Semana J
