Foto: Larkyn - Creative Commons |
La verdadera belleza interior es conquistada cuando
abrimos las murallas de nuestro corazón, y recibimos la aprobación de Dios.
¡No te equivoques!
No es el color de tu pelo, la marca de tus zapatos,
de tu ropa, ni de tu carro.
No son tus conocimientos, tus amigos, ni tu poder
adquisitivo.
No es pretender perfección, cuando vestimos nuestro
interior con harapos.
Es dar un paso de fe, y entender que no es nuestra apariencia lo que
verdaderamente cuenta, sino todo aquello que Dios es capaz de hacer en nuestras
vidas, cuando le damos entrada VIP a nuestro corazón.
Por eso no nos desanimamos. Aunque nuestro cuerpo se
va degastando, nuestro espíritu va cobrando más fuerza. 2 Corintios 4:16 (TLA)
Algunos beneficios de esta transacción:
1. Añade
un valor increíble a nuestras vidas y nos
premia con una belleza interior más efectiva que el bisturí, y muchísimo más atractiva que un implante de
senos y glúteos.
2. Hace
visible a través de nuestras palabras, acciones y actitudes los verdaderos
colores de nuestra identidad.
3. Nos
viste de amor, tolerancia y misericordia.
4. Atrae
amistades valiosas y verdaderas.
5. Elimina
el estrés innecesario en nuestras vidas.
6. Nos
libera de las opiniones de los demás.
7. Nos
engalana de paz y nos emperifolla de alegría.
Dios es la única persona en la bolita del mundo que
conoce la historia de tu vida de principio a fin. Es la única persona que
conoce tus debilidades y fortalezas. Es la única persona que conoce tus heridas
y fracasos. Y es la única persona que te ama y te aprueba sin condiciones, aun
sabiendo tus imperfecciones.
La gente se fija en apariencias, pero yo me fijo en el corazón. 1Samuel 16:7 (NVI)
¿Estás dispuesta a derribar las murallas de las
apariencias y darle entrada VIP a tu corazón?
Sandy