Es en el desierto donde realmente llegamos a comprender que Dios es la única fuente que suple todas y cada una de nuestras necesidades.
Mayo 14/2000
“Yo sé que me cuidas, peo no puedo negarte que tengo mucho miedo.”
Octubre 15/2001
“Tú enjugarás mis lagrimas y me darás las armas para pelear esta batalla… ¡Emergencia!”
Octubre 23/2001
“Aunque no entienda y aunque tenga mucho miedo, estoy segura de que cuidarás de mí”
Noviembre 01/2001
“Este proceso es duro, pero estoy segura de que vas delante de mí abriendo camino. Dame fortaleza en medio de la tribulación… Esperando mi victoria.”
Noviembre 05/2001
“Gracias por darme el deseo de volver a soñar. Gracias por alumbrar mi camino cada día.”
Enero 27/2002
“Dependo 100% de ti”
Estos son pequeños extractos de mis libretas de oración. Las guardo como un gran tesoro, porque me recuerdan de donde Dios me sacó y la misericordia que Él ha tenido conmigo en medio de cada uno de mis desiertos. Dios me ha dado mucho más de lo que yo esperaba y quiere hacer lo mismo contigo.
Si te sientes como una foto en blanco y negro; deprimida (o); triste; atemorizada (o); sin esperanza, desganada (o) y sin rumbo… ¡No te rindas! ¡Sigue orando! ¡Sigue creyendo! En el momento perfecto, Dios te sorprenderá con la lluvia fresca que hará florecer las semillas de fe, que sembraste en cada una de tus oraciones.
Dios no se cree la última Coca Cola del desierto. ¡Él es la única Coca Cola de tu desierto!
Él fortalece al cansado y acrecienta las fuerzas del débil… Pero los que confían en el señor renovarán sus fuerzas; volarán como las águilas; correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán.
Isaías 40:29,31 (NVI)
¡Con Dios todo es ganancia!
Disfruta tu estadía en el desierto, porque es ahí donde conocerás la grandeza Dios, y donde serás capacitada (o) para conquistar tu tierra prometida.
El señor ha escuchado mis ruegos; el Señor ha tomado en cuenta mi oración.
Salmo 6:9 (NVI)
¡Deja que Jesús sea la Coca Cola que refresque tu interior!
Feliz Semana
