viernes, abril 27, 2012

¡DAME UNA SONRISA!




Las lágrimas son un lavado, pero la risa sincera es un lavado en seco. Una buena risotada vale cien gemidos en cualquier mercado. Barbara Johnson




Ella puso todo su empeño en darme una palabra de aliento y fortaleza antes de yo ser intervenida quirúrgicamente, pero me dio tanta gracia lo que dijo, que casi me desmayo de la risa y por unos segundos experimenté los grandes beneficios de unas buenas carcajadas.

“Sandy, tranquila, todo va a salir bien. Recuerda que el vivir es Cristo y el morir es ganancia.” Mi hermano y yo nos dimos cambio de luces con las miradas, y eso fue suficiente para detonar un festival de risotadas, que sazonó con alegría la tensión del momento.

Ojo: Partir con Dios debe de ser una experiencia fascinante, pero por más espiritual que uno sea, difícilmente quiera morirse..O sea… es decir... hubiera preferido otra cita bíblica.

Les cuento que fue tanta la risa, que literalmente sentí como si se hubiera desprendido de mí, una maleta llena de estrés y ansiedad. Entré a la sala de operación como una pluma; y hoy que estoy en mi primer día de recuperación, no he tenido que tomar nada para el dolor. ¡Que maravilla!

El corazón alegre es una buena medicina, pero el espíritu quebrantado consume las fuerzas.
Proverbios 17:22 (NTV)

La risa es una medicina gratuita y muy efectiva. Cada día son más los estudios que confirman que nuestra felicidad es más una cuestión de decisión que de factores circunstanciales.

La risa combate la depresión, la angustia, levanta el ánimo, reduce la producción de las hormonas que causan el estrés. Reír cien veces al día equivale a hacer un ejercicio aeróbico por más de diez minutos. ¡Con razón me sentí tan bien en la sala de operación!

Hagamos de la risa un hábito, aún en medio de los problemas y las responsabilidades diarias. Es una herramienta sencilla y placentera que añade valor a nuestras vidas y a las de aquellos que nos rodean.

El corazón alegre hermosea el rostro.
Proverbios 15:13 (RVR1960)

¡Feliz Semana!