La humildad, la perseverancia, la disciplina, la paciencia y una actitud gozosa, te darán la victoria, que el talento por cuenta propia, nunca podrá.
La Liebre no pegó los ojos durante toda la noche, después de la humillación que sufrió frente a todos los animales del bosque. No se explicaba la manera tan ingenua en que la tortuga le había ganado la competencia – literalmente se sentía como una cucaracha.
Unos cuantos días pasaron, y por coincidencia se encontró con la Tortuga en el café del vecindario, quien en el momento degustaba un rico pastel relleno de guayaba y un cafecito con leche bien caliente. Aprovechó la oportunidad y acercándose a su mesa – altanero, igual que de costumbre, le dijo: “Aún no logro entender como ganaste… simplemente no lo entiendo”.
La Tortuga, en honor a su paz, decidió ignorar el comentario, y continuó saboreando su café, sorbo a sorbo. Lamentablemente, la liebre por estar de arrogante, se perdió la oportunidad de aprender sobre la agenda despeinada, que le ayudó a la Tortuga, lograr la victoria.
¡¿Agenda despeinada?!
Una agenda despeinada, es la que lucha por los sueños que Dios ha sembrado en su corazón, aunque no vea resultados inmediatos.
Una agenda despeinada, es aquella que siempre está a la expectativa de ver el poder de Dios obrar a través de sus limitaciones.
Una agenda despeinada, no espera días feriados para celebrar la vida. Hace de cada día una celebración
Una agenda despeinada, es la que planifica, trabaja con excelencia, y sabe levantarse cuando las cosas no salen bien.
Una agenda despeinada, no vive sueños ajenos, ni hace las cosas para recibir el aplauso de los demás. Busca la aprobación de Dios.
Una agenda despeinada, SIEMPRE busca la oportunidad de añadir valor a la vida de otros, a través de actos de bondad y palabras de afirmación.
Una agenda despeinada, trabaja duro por llegar a la meta, sin descuidar las bendiciones del hoy. Saborea el camino al éxito.
Una agenda despeinada, sabe que las buenas decisiones tomadas hoy, le garantizan la victoria de mañana.
Pero los que confían en el Señor tendrán siempre nuevas fuerzas y podrán volar como las águilas; podrán correr sin cansarse y caminar sin fatigarse. Isaías 40:31 (Dios Habla Hoy)
¡Desgreña tu agenda!
Feliz semana,