“Hoy es un buen día imposible de recuperar. Un ejemplar único, no lo dejes escapar” Jean Manuel Serrat
¿Sabías que Dios te ama incondicionalmente y se goza con tus triunfos y sueños realizados?.Si lo crees estás en el camino correcto y si no lo quieres creer, simplemente te estás perdiendo de algo extraordinariamente maravilloso.
Cada una de las promesas de Dios, están ahí para ayudarnos a alcanzar el potencial para el cual hemos sido creados. Lamentablemente, muchas veces nos sentimos que no merecemos nada de Dios, porque nos acostumbramos a ver nuestros errores del tamaño de un volcán y a la Gracia de Dios como un grano de arena.
Es tiempo de invertir los papeles. Recibe el perdón absoluto de parte de Dios y canta a todo pulmón como José José “Ya lo pasado, pasado, no me interesa”. Nadie puede conducir un auto, mirando por el espejo retrovisor.
“Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo!” 2 Corintios 5:17
Partiendo de esta fascinante verdad, podemos emprender libremente el peregrinaje que nos conduce a la realización de esos sueños que Dios firmemente ha sembrado en lo más profundo de nuestro corazón.
Cuando Dios es el centro de nuestras decisiones, no hay que buscarle la quinta pata al gato, porque ¡LA VICTORIA ES NUESTRA!, aunque parezca una locura para los demás.
“El Señor Dice: Yo te instruiré, yo te mostraré el camino que debes seguir; yo te daré consejos y velaré por ti” Salmo 32:8
Con una cobertura así, ¿Quién se atreve a no darle el trono de sus planes a Dios?
De seguro terminamos pintándonos la cara “Color Esperanza”, como Diego Torres y recordándole a Dios cada mañana que nos tiene “Colgando en sus manos”, como Carlos Baute.
“La Vida es un Ratico”, como dijo Juanes, así que hoy es el día perfecto, para trazarnos metas realistas que nos ayuden a disfrutar y saborear cada detalle de nuestro caminar.
¿Quieres un año victorioso?, comienza recibiendo el perdón y el amor invariable de Dios por ti. Dile como Tito el Bambino: “Te pido perdón. El amor se hace fuerte, cuando uno perdona porque ama y quiere”.
Señores, estar en paz con Dios, es algo que no tiene precio. Recibir su amor, su misericordia y su perdón, desata un gozo inexplicable. Es como si te llenaran el tanque de una adrenalina chispeante que te motiva a compartir abiertamente el milagro de su favor inmerecido.
Es por eso, que podemos disfrutar los pequeños detalles de la vida, como la canción de Jorge Celedon, que nos invita a valorar tantas cosas: “Que bonita es esta vida. Aunque a veces duela tanto y pesar de los pesares, siempre hay alguien que nos quiere, siempre hay alguien que nos cuida”.
Recibe este 2011, seguro de tu posición delante de Dios. Deja el exceso de equipaje en el pasado. Sé más agradecido. Sé instrumento de paz y no de discordia. Responsabilízate por tu propia felicidad. No te ofendas por tonterías. Comparte con los demás las cosas chéveres que Dios hace a diario en tu vida. Se la extensión de los brazos de Jesús aquí en la tierra. No te olvides de sonreír.
Dios no te garantiza una vida sin dificultades, pero sí la oportunidad de crecer a través de cada prueba, como dice Barbara Johnson: “El dolor es inevitable, pero el sentirse miserable es opcional”.
Con Dios, SIEMPRE tenemos la oportunidad de un nuevo comienzo.
¡FELIZ AÑO NUEVO!
