viernes, agosto 21, 2009
TUS BRAZOS SON MI REFUGIO
Hace unos días fui al centro comercial con mis hijas . Annamaria, de apenas tres añitos, decidió mostrarle al mundo su vena artística, bailando por todos los pasillos, parecía que tenía chínchas en sus zapatos. Noté que el piso estaba resbaloso y en más de una ocasión le dije: “Annamaria, ten cuidado, te puedes caer”. Nunca quiso escucharme, ignoró totalmente mis advertencias y …….. ¡Zaaaazzz! de repente calló al suelo.
Hubo silencio por un corto espacio de tiempo, mientras ella observaba detenidamente las personas a su alrededor. Cuando se dio cuenta que todos la miraban, la vergüenza fue tan grande que corrió a mis brazos, se cubrió su carita y lloró desconsoladamente.
Cuanto hubiera querido evitarle ésta experiencia a mi “Ardilla Voladora”, como la llama mi suegra, por sus curiosidades y travesuras. Lamentablemente no fue así, pero pude experimentar la ternura a un grado inexplicable, cuando la tomé entre mis brazos, besé sus mejillas y le hacía entender que no se preocupara que mami estaba con ella.
No importa la gravedad de tu situación, no importa cuan avergonzada te sientas por tus errores, no importa cuantas veces te han rechazado o te has sentido que no vales para nada. Dios ha esperado pacientemente este momento para sostenerte entres sus brazos, secar tus lagrimas y decirte
“no temas, yo estoy contigo”.
Decide aferrarte a esos brazos que levantaron a Lázaro de la tumba, que calmaron la mar embravecida , que con solo pronunciar una palabra los paralíticos caminaban y los ciegos veían , esos brazos que con solo tocarte te hacen sentir la mujer más amada del mundo, llenado tu vida de paz y optimismo aún en medio de las dificultades. ¿Te atreves?
¡Hola!, Soy Sandy.
Amante de la lectura, el café y la escritura sencilla y honesta.
Convencida de que existe una complicidad especial entre el silencio y una tacita de café caliente entre las manos.
Es mi deseo que mis palabras rieguen los rinconcitos vulnerables de tu corazón con amor y gracia.